Encuentra la verdadera validación en Dios - Pastor Steven Furtick

Table of Contents

1. Introducción
2. La Validación de Dios Sobre Nuestra Vida
   1. La falta de validación humana
   2. La validación de Dios basada en la relación
   3. Eres hijo de Dios, hecho a su imagen
   4. La sangre de Jesús te valida y limpia
3. La Validación de Dios y la Importancia de la Obediencia
   1. La validación de Jesús no se basa en su ministerio
   2. La importancia de la aprobación de Dios
   3. No necesitas la validación de las personas
   4. La paz de Dios viene después de la obediencia
4. La Tensión entre la Validación y la Tentación
   1. La validación y la tentación en la vida de Jesús
   2. La entrada en el desierto y la presencia de Satanás
   3. La prueba en el desierto y la resistencia a la tentación
   4. Encontrar la validación en Cristo y no en fuentes externas
5. Conclusión

¡Encuentra Tu Validación en la Relación con Dios! 🔥

Introducción

En la sociedad actual, es fácil caer en la trampa de buscar validación en las acciones y opiniones de los demás. Constantemente nos vemos presionados a cumplir con ciertos estándares y expectativas, lo cual puede llevarnos a sentirnos inseguros, insignificantes e incluso avergonzados de nosotros mismos. Sin embargo, es importante recordar que la validación de nuestro valor y propósito no debe provenir de las personas, sino de nuestra relación con Dios.

La Validación de Dios Sobre Nuestra Vida

La validación humana puede ser inconsistente y basada en el rendimiento. Las personas nos validarán en función de lo que hacemos por ellos o de lo valioso que sea nuestro comportamiento para su bienestar. Sin embargo, la validación de Dios no está condicionada por nuestro rendimiento. Él no valida lo que hacemos, sino quiénes somos. Es crucial entender que somos hijos de Dios, hechos a su imagen y comprados con la preciosa sangre de Jesús. Su amor y aprobación no se basan en lo que hacemos, sino en nuestra relación con Él.

La Validación de Dios y la Importancia de la Obediencia

La validación de Jesús no se basaba en su ministerio, sino en su relación con el Padre. A menudo nos preocupamos demasiado por lo que piensan los demás y buscamos su aprobación, pero la verdad es que la opinión de Dios es la única que realmente importa. No debemos ser esclavos de la aprobación humana, sino buscar la aprobación de Dios. Es liberador saber que nuestra valía no depende de lo que otros piensen de nosotros, sino de lo que Dios piensa de nosotros.

Cuando obedecemos la voz de Dios y seguimos su voluntad, encontramos la verdadera paz. No necesitamos esperar a sentirnos en paz para obedecer, sino que la paz viene después de la obediencia. Es en el proceso de cumplir el propósito para el cual fuimos creados que encontraremos la validación de Dios. No debemos posponer la obediencia esperando a que todo sea perfecto, sino confiar en que Dios nos guiará y nos dará su paz en medio de cualquier situación.

La Tensión entre la Validación y la Tentación

La vida de Jesús nos enseña que la validación y la tentación a menudo van de la mano. Después de que Jesús fue validado en su bautismo, el Espíritu Santo lo llevó al desierto, donde fue tentado por Satanás. Esto nos muestra que cuando Dios nos declara algo, inmediatamente tendremos la oportunidad de poner a prueba esa promesa. El mismo Espíritu que nos valida también nos lleva a través de pruebas y tentaciones para demostrar su poder en nuestras vidas.

Es importante recordar que nuestra validación no debe provenir de fuentes externas, sino de nuestra relación personal con Cristo. Satanás intentará persuadirnos para que busquemos la validación en cosas materiales, en el reconocimiento humano o en nuestras propias capacidades. Sin embargo, debemos resistir esas tentaciones y encontrar nuestra validación en la relación íntima que tenemos con Dios. Solo cuando buscamos su aprobación y confiamos en su dirección, encontramos la verdadera paz y seguridad.

Conclusión

No permitas que la falta de validación humana te afecte. Encuentra tu seguridad y aceptación en la relación que tienes con Dios. Dale más importancia a lo que él piensa de ti que a la opinión de los demás. Recuerda que la paz de Dios viene después de la obediencia y que encontrarás la verdadera validación al cumplir el propósito para el cual fuiste creado. No te dejes llevar por la tentación de buscar validación en fuentes externas, sino busca únicamente la aprobación de Dios. ¡Vive confiando en su amor y aceptación incondicional!

Highlights:

• La validación de Dios no está condicionada por nuestro rendimiento, sino por nuestra relación con Él.
• La verdadera paz viene después de la obediencia y al cumplir nuestro propósito en Dios.
• No busques validación en fuentes externas, sino en la relación íntima que tienes con Dios.

FAQ

P: ¿Es importante buscar la validación de Dios en lugar de la validación humana? R: Sí, buscar la validación de Dios es fundamental, ya que la validación humana puede ser inconsistente y basada en el rendimiento.

P: ¿Cómo puedo encontrar la paz de Dios en medio de las pruebas y tentaciones? R: La paz de Dios viene después de la obediencia. Confía en su dirección y persevera en medio de las pruebas, sabiendo que Él está contigo.

P: ¿Por qué es peligroso buscar validación en cosas materiales o en el reconocimiento humano? R: Buscar validación en cosas materiales o en el reconocimiento humano nos lleva a una búsqueda constante de satisfacción externa y nos deja vacíos. Solo la validación de Dios puede llenar ese vacío y brindarnos la verdadera paz y felicidad.